Cómo configurar tu propio servidor de correo electrónico

Cada vez más, el correo electrónico se ha vuelto omnipresente en nuestros días, incluso más que lo era la carta comercial hace apenas unas décadas. Contar con un servidor de correo electrónico confiable es crucial para la mayoría de las empresas. Sin embargo, muchas compañías, especialmente las más pequeñas, no han dado el siguiente paso de alojar sus propios servidores de correo. Algunas confían en su proveedor de servicios de Internet local para obtener servicios de correo electrónico, mientras que otras recurren a Hotmail, Yahoo u otros proveedores globales de servicios de correo. Configurar tu propio servidor de correo electrónico ofrece algunas ventajas interesantes, ya sea que necesites dar soporte a cientos de usuarios o simplemente quieras tener tu propio servidor de correo en una oficina pequeña. En este artículo, te guiaré a través de los pormenores de la configuración de tu propio servidor de correo.

Tener un servidor de correo electrónico propio

La mayoría de los proveedores nacionales y locales de servicios de Internet no ofrecen muchas características cuando se trata de sus sistemas de correo. La mayoría de ellos te dan la capacidad de filtrar tus mensajes para intentar bloquear todos esos mensajes molestos sobre planes de dieta herbal, consolidación de deudas y acciones candentes, sin mencionar todos esos mensajes no solicitados que no querrías que tu querida abuelita viera. Pero ahí termina el nivel de servicio. Si deseas características como respuestas automáticas fuera de la oficina, respuestas automáticas, buzones de correo ilimitados y reenvío de correo, debes tomar el control y configurar tu propio servidor de correo.

Tal vez pienses que configurar tu propio servidor de correo significa una gran inversión en nuevos equipos, software costoso y tiempo para administrarlo todo. Sin embargo, si tienes una conexión a Internet de banda ancha siempre activa, puede ser muy sencillo. Debido a que muchas de las aplicaciones del servidor de correo se ejecutan en Windows 9x y otros sistemas operativos no de servidor, es posible que ni siquiera necesites cambiar tus sistemas existentes. Incluso si no tienes una conexión a Internet dedicada, aún puedes instalar un servidor de correo que marque el número de tu proveedor de servicios de Internet para enviar y recibir mensajes.

Lo que realmente necesitas, sin embargo, es entender cómo se enrutan los mensajes de correo electrónico en Internet, cómo hacer que esos mensajes pasen por tu servidor, qué características buscar en un servidor de correo y luego cómo integrarlo todo en un paquete de trabajo. Antes de entrar en los detalles técnicos, veamos qué puedes esperar de tu propio servidor de correo.

¿Qué ganarás o perderás?

Una de las principales ventajas de configurar tu propio servidor de correo es tener un control total sobre la cantidad de buzones de correo que puedes tener, cómo se configuran esos buzones y cómo funcionan. ¿Te estás encontrando con limitaciones de tamaño en tu servicio de correo actual? ¿Tu buzón actual se llena constantemente o rechaza tus mensajes porque son demasiado grandes? ¡No hay problema! Cuando tú mismo eres el dueño del servidor de correo, puedes hacer lo que quieras. Adelante y envía ese archivo adjunto de 20 MB a la oficina remota.

Eso nos lleva a otra ventaja importante que tu propio servidor de correo puede brindar. Puedes extender los beneficios a otros, alojando cuentas para otras sucursales o incluso para socios. Esto es especialmente útil si has logrado obtener un nombre de dominio para tu empresa. Pero hay un inconveniente si tus sitios remotos y socios comerciales comienzan a depender demasiado de sus cuentas de correo. Si tu conexión a Internet se cae durante algunos días por razones fuera de tu control, o si tu servidor de repente se infecta con el virus de moda, no querrás que la gente te llame a las 2 a. m. para quejarse. He trabajado en el negocio de soporte 24/7 y lo odiaba. Tú también lo odiarás si te encuentras en esa posición. Si abres tu servidor a otros, asegúrate de que entiendan que obtienen lo que pagan y que deberían tener una opción de respaldo, como Hotmail o Yahoo. También deberías tener un respaldo para tu propia cuenta de correo electrónico.

Cómo configurar un servidor de correo electrónico utilizando Postfix

Los autorespondedores son otra característica útil ofrecida por muchos servidores de correo y son muy similares a las respuestas automáticas fuera de la oficina. Por ejemplo, tal vez tienes un documento que deseas que las personas puedan obtener simplemente enviando un mensaje a una cuenta específica. Un cliente puede enviar un mensaje a [email protected] y recibir una respuesta con tu receta de fudge favorita. Las empresas a menudo utilizan autorespondedores para distribuir información sobre productos y servicios. Ya sea que administres servicios para una empresa comercial o que gestiones un pequeño negocio desde tu hogar, los autorespondedores podrían ofrecerte una nueva forma de interactuar con tus clientes.

Muchos servidores de correo ofrecen características que facilitan la distribución de correo a grupos de personas. Si bien puedes crear listas de distribución con cualquier cliente de correo electrónico, crear grupos en el servidor permite que cualquiera envíe correo a ese grupo a través de una única dirección de correo electrónico. Algunos servidores de correo te permiten enviar mensajes a los miembros del grupo de forma rotativa. Esto significa que cada mensaje nuevo se envía a una persona diferente del grupo. Esta es una excelente manera de distribuir los mensajes de manera equitativa en todo el grupo y se suele utilizar para distribuir solicitudes de ventas o soporte.

Mantener fuera el spam es otro beneficio potencial de alojar tu propio servidor de correo. Si bien puedes crear reglas en tu cliente de correo electrónico para eliminar mensajes de remitentes específicos, mantener fuera el spam para varias cuentas de correo puede ser un dolor de cabeza, especialmente si tu servicio actual no te ofrece ninguna función de bloqueo de spam. Con la función de antispam incorporada en el servidor, puedes bloquear correos electrónicos de dominios o remitentes específicos para todas las cuentas.

Además, muchos servidores de correo ofrecen escaneo de virus integrado o pueden utilizar complementos para escanear mensajes que entran y salen del servidor. Puedes usar esto junto con un software de escaneo de virus en el cliente para agregar otra capa de seguridad a tu red doméstica.

Preparando el terreno

Para configurar tu propio servidor de correo electrónico y mantenerlo funcionando, necesitas comprender cómo se enruta el correo electrónico en Internet. El Protocolo de Transporte Simple de Correo (SMTP, por sus siglas en inglés) es el que conecta los mensajes de correo en Internet. Los servidores de correo utilizan este protocolo para comunicarse entre sí, y los clientes de correo electrónico lo utilizan para enviar mensajes. Por ejemplo, digamos que envío un mensaje a mi tío Ned pidiéndole una copia de su receta de cebolla encurtida. Mi programa de correo (supongamos que es Outlook Express) se conecta al servidor de correo de mi cuenta usando comandos SMTP.

A través de estos comandos, mi mensaje se coloca en la cola de correo saliente del servidor. Luego, el servidor analiza la dirección del mensaje para determinar el destino. Consulta al DNS (Sistema de Nombres de Dominio) para encontrar la dirección IP del servidor de correo que sirve a ese dominio de destino. Mi servidor usa SMTP para comunicarse con el otro servidor y entregar el mensaje. Si un problema de red o de servidor impide que los dos servidores transfieran el mensaje, el mensaje permanece en la cola de correo saliente del servidor que lo envía durante un período de tiempo específico (por defecto, generalmente cuatro días). El servidor intenta reenviar periódicamente el mensaje y, si no puede hacerlo antes de que expire el período de caducidad especificado, devuelve el mensaje al remitente con un recibo de no entrega (NDR, por sus siglas en inglés).

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Cuando llega el momento de que el tío Ned reciba el mensaje, tiene varias opciones. La más común es el protocolo POP3. Cuando te conectas a un buzón en el servidor de correo de un ISP, el programa de correo utiliza POP3 para recuperar el mensaje. Con POP3, los mensajes se descargan en tu computadora local, pero puedes optar por dejar una copia de los mensajes en el servidor. Esto te permite recuperar los mensajes desde otra computadora, si es necesario.

IMAP es otro protocolo compatible con muchos servidores de correo. Con IMAP, los mensajes permanecen en el servidor y puedes acceder a ellos en tiempo real. Puedes leer y eliminar mensajes del servidor, así como crear nuevos. Sin embargo, los mensajes nuevos se envían utilizando SMTP en lugar de IMAP. IMAP es una buena opción cuando necesitas acceder al correo desde más de una computadora, ya que el correo está siempre disponible en el servidor en lugar de descargarse en tu computadora. No tienes que preocuparte por sincronizar los almacenes de correo en diferentes computadoras. Sin embargo, se requiere un cliente de correo, como Outlook Express, Outlook o Eudora, que admita cuentas IMAP.

Algunos servidores de correo también admiten HTTP, el mismo protocolo que se utiliza para mostrar páginas web. El soporte de HTTP te permite enviar y recibir correo a través de tu navegador web. Yahoo y Hotmail son dos ejemplos de servicios que ofrecen correo electrónico basado en HTTP, y Outlook Web Access (OWA) bajo Exchange Server también ofrece esta capacidad. La principal ventaja de usar HTTP es que no necesitas un programa de cliente de correo electrónico dedicado, sino que puedes confiar en tu navegador web para enviar y recibir correo. Esto facilita el trabajo con tus mensajes desde cualquier computadora.

Elegir el software adecuado

Cuando operaba un proveedor de servicios de Internet, utilizaba Microsoft Exchange Server para proporcionar correo electrónico a nuestros clientes. Como podrás imaginar, instintivamente recomiendo Exchange Server para servidores de correo electrónico nuevos. Sin embargo, Exchange Server tiene un precio cercano a los $700 sin licencias de cliente y cerca de los $1,300 con cinco licencias, lo que lo coloca fuera del alcance de la mayoría de las pequeñas empresas.

Si Exchange Server parece tener demasiada potencia o es demasiado caro, existen muchos otros programas de servidor de correo comercial, shareware e incluso gratuitos que van desde gratuitos hasta unos pocos cientos de dólares. Una búsqueda en los sitios de descargas populares, como CNET Shareware.com, Tucows y otros, te ofrecerá un par de docenas de programas de servidor de correo.

Cuando busques un servidor de correo para usar en tu negocio u oficina en casa, comienza descartando aquellos que no se ejecuten en tu sistema operativo. En la mayoría de los casos, los programas diseñados para Windows NT o Windows 2000 también se ejecutarán en Windows XP, pero verifica con el proveedor para asegurarte. Además, la mayoría de los servidores de correo para Windows NT se ejecutan tanto en Workstation como en Server, mientras que la mayoría de los escritos para Windows 2000 se ejecutan tanto en Professional como en Server.

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A continuación, decide qué protocolos y características deseas que tenga tu servidor de correo. El soporte de POP3 y SMTP es básico, pero si deseas soporte para HTTP, tus opciones serán más limitadas, ya que es una función que muchos servidores de correo no tienen. Aun así, hay servidores disponibles que admiten HTTP y no son muy costosos. La comodidad de poder enviar y recibir mensajes a través de un navegador web puede compensar el costo adicional de un servidor que admita HTTP o un complemento de HTTP.

Una vez que hayas reducido tu selección en función de los protocolos, puedes comenzar a analizar las otras características que necesitas. Algunos servidores de correo funcionan principalmente como pasarelas de correo hacia tu servidor de correo de ISP existente y no actúan como servidores de correo independientes para la entrega directa de correo desde Internet. Otros ofrecen ambas capacidades, funcionando como un servidor de correo independiente mientras también recuperan tu correo de otros servicios de correo.

Luego, analiza las características especiales de las cuentas, como el soporte para autorespondedores, grupos de correo, la capacidad de funcionar como un servidor de lista de correo, filtrado de spam, escaneo de virus y cualquier otra función avanzada que desees tener.

Poniéndolo todo junto

Un aspecto que aún no he discutido es cómo conectas tu servidor a Internet. Debes familiarizarte con el proceso antes de comprar el software y hacer cambios en el sistema.

En primer lugar, necesitarás tu propio dominio si deseas recibir mensajes directamente en tu servidor. Puedes registrar tu dominio en Network Solutions, Register.com, Go Daddy, WebSite.ws y a través de otros proveedores de dominios. Al registrar un dominio, debes proporcionar la dirección IP y el nombre de host de al menos un servidor DNS para tu dominio, aunque la mayoría de los servicios de registro requieren dos servidores DNS. Si ejecutas Windows NT Server o Windows 2000 Server, puedes usar el servicio de DNS incluido en esas plataformas para alojar tus propios registros de DNS. De lo contrario, puedes utilizar una aplicación de servidor DNS de terceros.

Luego, debes crear o permitir que tu registrador cree un registro de host en la zona DNS de tu dominio. El registro de host asocia un nombre de host con una dirección IP. Por ejemplo, el nombre de host de mi servidor de correo es mail.boyce.us. Además del registro de host, también necesitas un registro MX. Este registro de intercambio de correo le indica a otros servidores de correo qué dirección utilizar para entregar el correo a tu dominio. Nuevamente, debes crear el registro MX en tu propio servidor de DNS o permitir que tu registrador lo cree en sus servidores, dependiendo de dónde se encuentre tu servicio de DNS. Ambos registros deben apuntar a tu dirección IP pública.

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Ahora es el momento de conectar tu servidor. Si tu red es como la mayoría, con una conexión de banda ancha, tendrás un pequeño número de direcciones IP públicas (quizás solo una) y todas tus computadoras utilizarán direcciones IP privadas. El registro MX debe referenciar la dirección IP pública porque es la única que el mundo exterior puede ver. Entonces, si tu router DSL o módem por cable tiene asignada la única dirección IP pública, debe reenviar el tráfico SMTP entrante a la IP privada de tu servidor de correo.

Consulta la documentación de la unidad y verifica si admite la traducción de direcciones IP de uno a uno (NAT, por sus siglas en inglés). Muchos routers de cable/DSL te permiten traducir puertos específicos, por lo que configurarías la unidad para pasar el puerto 25 (SMTP) desde la dirección IP pública a la dirección IP privada de tu servidor de correo. Si utilizas tu propio servidor de DNS, también deberás traducir el puerto 53 para redirigir el tráfico DNS a la dirección IP privada de tu servidor DNS (probablemente la misma computadora que se está encargando del correo). Si alguien, incluido tú, necesita poder recuperar mensajes del servidor fuera de tu red (como desde Internet), también debes traducir el puerto 110 (POP3) desde la dirección IP pública hasta la dirección IP privada del servidor de correo.

Si tu router de cable/DSL no admite NAT, deberás reemplazarlo o obtener una segunda dirección IP pública de tu ISP. Luego, configura el servidor con esa dirección IP. Cómo conectas el servidor a la red depende del tipo de equipo que utilices, así que consulta con tu ISP si no estás seguro.

El último paso es instalar el software del servidor de correo y comenzar a configurar las cuentas. También deberás configurar el DNS y asegurarte de que funcione si vas a proporcionar tus propios servicios de DNS. Luego, podrás enviar correos electrónicos con total libertad.

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